viernes, 30 de mayo de 2014

DIEGO DE GIRÁLDEZ . " LO QUE EL ARTISTA VE " - LOS MIEMBROS INFERIORES.



De interés para la observación.- Cuando se endereza la pierna con fuerza, la grasa suelta que hay entre el ligamento de la rótula y la tibia, queda comprimida y forma un ligero vientre a cada lado del ligamento.
El vasto interno forma una masa muscular mucho más visible, precisamente encima del nivel de la rótula, de lo que lo es el vasto externo y presenta en lo muscular una curiosa cavidad dirigida hacia abajo, hacia dentro y hacia atrás.
El mantenimiento de la posición erguida, depende tanto en la cadera como en la rodilla, más de los ligamentos que de los músculos, de modo que el cuadriceps queda con frecuencia sin actuar y entonces la rótula cae algo hacia adelante y hacia abajo.
 La corva, hueco, espacio poplíteo es el hueco o cavidad detrás de la rodilla. Pero hay que tener presente que no es un hueco más, que cuando la rodilla está doblada, pues cuando la extremidad está en línea recta, el hueco está sustituido por una prominencia. Esto ocurre principalmente por la forma del extremo inferior del fémur y del superior de la tibia, de los cuales, constituye la forma especialmente el primero son ambos prominentes y oprimen hacia atrás la adiposidad blanda y otros componentes de la zona poplítea, como son la arteria , la vena principal y los nervios del miembro inferior.
El hueco de la corva, se ve en la disección que tiene la forma de un rombo con su eje vertical, lo menos tres veces más largo que el horizontal. Los vértices del rombo pueden generalmente verse con facilidad sin necesidad de disección alguna, pero el más fácil de observar es el de arriba.
Los lados superiores del rombo son más largos que los inferiores y si es mayor la longitud en la parte situada arriba de la diagonal horizontal del rombo que en la parte situada debajo. Hay que recordar que los músculos que atraviesan la corva, al descender por el muslo forman dos crestas divergentes.
En el angulo de divergencia está el vértice superior del espacio poplíteo. Se halla éste situado en la unión del tercio medio y el inferior de  la parte de atrás del muslo.
Se comprende claramente que el biceps forma el límite superior y externo y el simimenbranoso y el semitendinoso los límites superior e interno del rombo.
Los lados inferiores de éste están formados por las dos cabezas de los músculos gemelos, y son mucho menos prominentes que los lados superiores, tanto que no están bien definidos como no se proceda a su disección.
Las partes superiores de los músculos gemelos están envueltos por los músculos que forman los límites superiores del espacio poplíteo.
Hay aún otra cresta muscular que se nota en relación con el lado interno de la rodilla. Éste se halla colocado oblicuamente y dirigido desde atrás de la prominencia que está formada por el cóndilo interno del fémur  hacia abajo y hacia adelante, para terminar en la superficie interna de la tibia, en el nivel mismo o cerca de él - de su tubérculo.
La cresta es debida a los tendones de los músculos, recto interno del muslo, sartorio y semitendinoso, los cuales tienen una inserción común, aunque se originan en el hueso innominado en puntos muy distintos y casi equidistantes uno del otro.
El recto interno del muslo procede de cerca de la sínfisis del pubis, el sartorio de la espina anterosuperior y el semitendinoso de la tuberosidad del isquión.
La concavidad externa y la convexidad interna, más arriba descrita, en relación con los lados de la rodilla, merece la pena ser examinados con observación profunda ya que difieren considerablemente en los niños de poca edad y en los adultos de ambos sexos. La diferencia entre el varón y la mujer en ninguna parte de los miembros es tan pronunciada como en la región de la rodilla.
La convexidad interna es mucho más marca en la mujer que en el varón, en el niño que en el adulto y en ambos sexos es debida
 primero, a la inclinación hacia  dentro del fémur al extenderse hacia abajo, desde la cadera hasta la rodilla, y segundo, al gran tamaño del cóndilo interno. Debido a la mayor distancia relativa entre los acetábulos de la  pelvis, lo que es indicación exacta de la anchura la oblicuidad femoral hacia dentro es más pronunciada en la mujer que en el varón.
La misma línea de la articulación de la rodilla es transversal, las piernas son paralelas, pero los muslos se inclinan uno hacia el otro y de ahí que una ligera tendencia a aquella forma o disposición que cuando es exagerada hace que las rodillas se junten al andar o al contrario en las arqueadas, donde se distancian las rodillas formando así una semicircunferencia, lo anterior nombrado se observa hasta en el modelo normal...