Es fácil encontrar modelos que en sus miembros inferiores tengan varices, es decir que presenten dilatación permanente en vena.
Las venas superficiales y las profundas comunicadas entre si por ramas, lanzan la sangre hacia el corazón, a veces con
dificultad debido a una serie de factores que intervienen en el impulso.
Las venas profundas cuentan con la ayuda de las contracciones musculares, a veces se ve en el modelo flebitis por el deterioro en la zona interna.
Las venas superficiales, muy llamativas en la construcción de la pierna en el modelo, a veces desgarrada y alterada por las varices, al circular por debajo de la piel carecen de apoyo muscular, aunque esas venas poseen una fuerte pared contráctil que le permite actuar impulsando la sangre y tienen en la superficie interna repliegues membranosos a manera de válvulas que contrarrestan la acción desfavorable de la gravedad.
Detrás de unas varices se encuentran influencias hereditarias, trastornos endocrinos permanencja, excesiva de pie, flebitis, embarazo o infecciones de varios tipos. De esa manera las paredes venosas se alteran, se dilatan, las válvulas se distienden y la circulación venosa se invierte o se estanca convirtiendo el sentido contrario.
Las consecuencias de este remanso venoso son de importancia diversa, desde hormigueos, calambres o dolores. También producen situaciones más serias, roturas, flebitis, úlceras, infecciones, etc.
